Marx y Engels tenían razón???

LA PRECARIEDAD TIENE MUCHAS CARAS,
¿ALGUNA DE ELLAS TE ESTÁ MIRANDO?

Vives en precario si.......

• Si no te acercas al salario mínimo (neto) de 1.285 euros/mes.
• Si ganas menos que tus compañeros por el mismo trabajo.
• Si tu contrato es temporal y sin derechos.
• Si utilizan el miedo para no renovarte mañana.
• Si trabajas de «becario».
• Si eres un autónomo que depende de otros que cada día te dan y te organizan tu trabajo.
• Si trabajas para una ETT o para una subcontrata que depende de otra contrata.
• Si eres una persona jubilada o viuda y no llegas a los 900 euros al mes de pensión.
• Si un especulador sin escrúpulos te hace «mobbing inmobiliario».
• Si no puedes disponer de tu tiempo porque el trabajo no te deja tiempo libre.
• Si eres discriminado por tu origen y tienes que soportar comentarios racistas.
• Si te niegan los papeles y te condenan a la semiesclavitud del trabajo irregular.
• Si eres discriminada por ser mujer y has de tolerar comentarios o actitudes machistas.
• Si no puedes expresarte sindicalmente en tu trabajo sin miedo a represalias.
• Si no te llega para una vivienda digna de alquiler o de compra.
• Si no puedes tener proyecto de vida propio y has de alargar la convivencia con tus padres.
• Si estás en el paro y no encuentras una ocupación digna y estable en tu profesión.
• Si te entretienen con cursos y cursos de formación.
• Si puedes tener un accidente laboral, físico o por secuelas del estrés.
• Si ....................

AUNQUE TE CREAS FIJO Y CON DERECHOS, LA PRECARIEDAD PUEDE LLAMAR A TU PUERTA.

Las amenazas de cierre de Fisipe, Papelera i demás subcontratas y la incertidumbre sobre el futuro de Catalana de Polímers y otras empresas, han creado una situación alarmante en el pueblo en la que centenares de familias están a punto de perder su puesto de trabajo con las dramáticas consecuencias que eso comporta. Ante esto, desde diversos ámbitos de la sociedad civil pratense, el mes de marzo del 2004 se creó la “Xarxa Social de El Prat contra els tancaments i l’especulació”, para denunciar i hacer pública esta situación, apoyando a los trabajadores amenazados en su demanda contra los cierres. La Xarxa Social respondía a una llamada de muchos trabajadores que se veían traicionados por los pactos entre los empresarios y sindicatos mayoritarios, los cuales ya se habían conformado con el pago de una indemnización y se dedicaban a regatear el número de días trabajados. Nosotros queríamos mirar más allá, viendo que la perdida de aquellos puestos de trabajo no sólo afectaba a los trabajadores que en aquellos momentos estaban amenazados, sino también, a las generaciones futuras que veían desaparecer la industria en el pueblo. Una industria que desaparece gradualmente sustituida por el sector servicios, con peores condiciones laborales y salariales. El nuestro era un llamamiento de solidaridad ante una situación de alarma que nos afecta a todos y en la que el ayuntamiento de El Prat únicamente se limita a hacer declaraciones de buenas intenciones y palabrería barata sin aportar ninguna solución al problema, como si la cosa no fuese con ellos. El 25 de abril un millar de personas recorrimos las calles de El Prat para pedir la continuación de las fábricas amenazadas. En esta manifestación el comercio local se mostró solidario con los trabajadores, haciendo un acto simbólico de bajada de persianas, y muchas fueron las asociaciones, sindicatos y ciudadanos en particular que dieron apoyo explícito a aquel acto. Como siempre, las instituciones, los partidos políticos oficiales y los sindicatos mayoritarios se lavaron las manos y dieron la espalda a este acto masivo de participación social.
Pero la situación de precariedad que vivimos no se circunscribe sólo a este ámbito. La incidencia de la población sobre las actuaciones de los políticos está cada vez más alejada. Las instituciones continúan dando la espalda al pueblo en muchos problemas que le afectan directamente. El ayuntamiento se dedica a hacer política de pasillos en una esfera cada vez más aislada y alejada de los intereses reales de la población, la cual sólo se tiene en cuenta cada cuatro años cuando hemos de poner un papelito en una urna, y en este sentido tanto dan unas siglas que otras. El tripartit y el gobierno de Zapatero han desinflado todo su discurso de cambio cuando han pisado el poder, y las antiguas promesas hoy continúan siendo los mismos problemas. La nueva constitución europea, claramente derechista y antisocial, viene a apuntalar esta situación creciente de regresión en nuestros derechos. Queremos recordar los millares de personas que se manifestaron en Barcelona contra la Europa del capital en marzo del 2002, con motivo de la cumbre europea que preparaba precisamente esta constitución, y el oportunismo de algunos partidos y sindicatos que estando en aquella manifestación ahora dan apoyo a todo contra lo que nos manifestábamos.

UNA MIRADA RÁPIDA SOBRE GRANDES PROBLEMAS ACTUALES DE EL PRAT

- ESPECULACIÓN: La situación de la vivienda cada vez es más dramática y lo que tiene que ser un derecho básico se ha convertido en un privilegio que cuesta esfuerzos titánicos a gran parte de la ciudadanía. La gran mayoría de los jóvenes no pueden acceder a una vivienda: los sueldos precarios, la temporalidad, la nula estabilidad económica, la falta de alquileres, las hipotecas a 40 años, las subidas continuas del precio de las viviendas, la escasa oferta de edificios de
protección oficial, la existencia de más de 4000 viviendas vacías, el mobbing inmobiliario.... son factores que parecen no tener importancia para los que gobiernan. El precio del suelo en El Prat es de 2092 euros el metro cuadrado, un negocio redondo para constructoras y inmobiliarias que no dudan en hacer negocio de forma escandalosa con pisos que rondan como media los 40 millones. No podemos olvidar que fábricas como La Seda y la Papelera han sido directamente compradas por inmobiliarias, para especular con sus terrenos, y que detrás de Fisipe y Catalana de Polímeros se mueven los mismos intereses. Ante esta situación parece que los gobiernos no tienen ninguna propuesta realmente efectiva y se dedican ellos mismos a especular con terrenos públicos, facilitando las recalificaciones o vendiéndolos directamente.

- LABORAL: La situación laboral está marcada por la precariedad y la temporalidad. El 90% de los puestos de trabajo que se crean son temporales y con sueldos bajísimos. El mercado laboral se encuentra en manos de las ETT’s y empresarios sin escrúpulos con todas las facilidades legales para despedir a los trabajadores. La situación de los derechos de los trabajadores está retrocediendo a marchas forzadas con la colaboración de los sindicatos mayoritarios que pactan con la patronal y el gobierno (también con el PP) estatutos que sólo benefician a los empresarios. Cada vez son más las personas que van saltando de un trabajo a otro, con sueldos de miseria y sin ningún tipo de estabilidad futura. Los cierres y las deslocalizaciones son una nueva forma de precarizar el trabajo, y lo que antes afectaba generalmente a los jóvenes ahora comienza a afectar a familias enteras. La situación laboral de los inmigrantes es todavía más dramática, obligados a aceptar lo que sea y como sea.

- ECOLOGIA: En nuestro pueblo el plan delta ha afectado radicalmente nuestro entorno dejándolo en su mínima expresión. La tercera pista del aeropuerto se construye talando 20.000 pinos y derribando masías centenarias, el desvío del río Llobregat continua aunque exista una sentencia del Tribunal Suprem sobre su ilegalidad, la pagesia desaparece encerrada en áreas temáticas llamadas “parc litoral”, el AVE se convierte en la prioridad del ayuntamiento cuando los ciudadanos no parecen estar mayoritariamente interesados, barrios como Les Palmeres continúan afectados y amenazados con su desaparición, y todo este delito ecológico se hace en nombre de “la ecología y la sostenibilidad”. Están vendiendo nuestro territorio a consorcios y multinacionales, la gestión del territorio es una forma más de especulación, el 50% del suelo del pueblo ya no nos pertenece, y la gente de El Prat no tenemos ni derecho a quejarnos ni tampoco vemos los beneficios en puestos de trabajo que nos prometieron.

Como vemos la situación en España cada día anda mas pior, es preocupante sobre todo para los que la veíamos como un escape ideal. Y bue habrá que pensar en otro lugar...